Muchos decidirán tirarlo por el lavaplatos, alcantarilla, quemarlo, dárselo a algún animal o regarlo en la manga. Pero estas prácticas caseros resultan contraproducentes. Su mala disposición causa obstrucciones en las tuberías, produce efectos negativos en la regeneración de quebradas, ríos, fauna y flora y, además, genera problemas en las plantas de tratamiento de agua que requieren procesos más costosos. Buscando evitar que se haga una mala utilización del aceite usado surgió el programa de recolección y reciclaje de Aceite de Cocina Usado (ACU) que lidera Ecogras.
Esta empresa, creada hace año y medio en la ciudad, se encarga de recolectar y reciclar el aceite generado en los hogares y restaurantes para transformarlo en materia prima, utilizada en la fabricación de biodiesel, jabones y cuido para animales.
Luis Felipe Tobón, gerente de Ecogras, afirma que dentro de su Responsabilidad Social y Medioambiental también evitan que el aceite sea revendido en el mercado negro para consumo humano. El dirigente explica que el aceite debe utilizarse entre tres y cinco veces, porque más de eso pierde sus propiedades y se vuelve peligroso para la salud humana. Después debe verterse en algún tarro. Luego, recicladores en los barrios lo recogen y lo llevan al acopio para juntarlo con los de otros compañeros. En el caso de las unidades residenciales, la persona encargada de los servicios varios recolecta los tarros y lo deposita en un recipiente. Ecogras se encarga de ir a recoger lo que ya tengan almacenado tanto en los acopios, unidades y restaurantes.
«Buscamos enseñar a las personas en los hogares e industrias a hacer una disposición adecuada del aceite de cocina después de usado», agrega Tobón. De las 650.000 viviendas censadas en Medellín, hasta el momento Ecogras ha impactado 6.000.
Para conseguir apoyo, mayor cobertura y divulgación ha firmado convenios con Recimed, Asei, Corpoblado, Mesa ambiental El Poblado, Área Metropolitana, Secretaría de Medio Ambiente, PM y están buscando aliarse con aceiteras y almacenes de cadena. «En el tema ambiental las personas son muy perezosas. Nosotros apenas las estamos educando para que entreguen el aceite, porque la gente no tiene ni idea que este se recoge y se recicla», dice Tobo.
Todos los días Ecogras hace recolección y semanalmente recoge cinco toneladas de aceite. Aunque empezaron en Medellín, se han expandido por el valle de Burra y algunos municipio del departamento se han mostrado interesados.
«Estamos viendo cómo hacemos para abarcar más lugares del departamento y por qué no, más adelante poder estar en todo el país», afirma Tobón
Fuente: El Tiempo